Aunque parece deseable que los políticos digan lo que piensan y hagan lo que dicen, las declaraciones del Alcalde de Valladolid sobre la recien nombrada Ministra de Sanidad Leire Pajín me hacen replantearme la mencionada afirmación sobre el deseable proceder de los políticos.
No Alcalde, ni en este reaccionario blog diría yo nada sobre lo que me inspiran o creo que inspiran "los morritos" de la ministra. En realidad lo que se deduce de sus palabras es que a vd. la ministra le pone a tono y que verle el rostro le excita por pura animalidad sexual propia o de otros.
¡Alcalde,la ha cagado bien! Y claro los enemigos del PP han aprovechado para explotarla en su beneficio esa metedura de pata de taberna, y hacen bien.
Estaba pensando a propósito de todo esto, y como se ha comentado a raíz de sus desafortunadas palabras, si se puede concluir que en la lucha política o en los comentarios periodísticos no se puede hablar del aspecto físico atractivo o no, de los políticos; no veo tan fácil de zanjar el tema. Federico Jimenez Losantos sabe utilizar con habilidad ciertos epitetos que quedan siempre a este lado de la barrera del buen gusto, además de resultar ciertos y graciosos.En realidad la materia es tan vieja como el Derecho Penal y es el discernimiento de lo que son o no INJURIAS y de la admisión o no de la exceptio veritatis, con el horizonte de que per se los comentarios zafios o groseros, no son necesariamente penales, ni como delito ni como falta, lo cual no libera a su autor de ser dueño y esclavo de sus palabras y de salir indemne de ellas, aunque el coste sea meramente político que no es poco.
En realidad yo como populacho me alegro de que esta gente entre sí, se atice de tal guisa y que la tensión dramática no decaiga,solo faltaría que lamentemos momentos de risa a costa de todos nuestros mangantes institucionales. Además, ¿qué le vamos a hacer si la cesada vicepresidenta y el aupado ministro Rubalcaba tienen rostros simiescos?. ¿Es eso un insulto?. Hay formas graciosas de decirlo como acudir a la etiqueta del Anís del Mono. Y lo que todos sabemos es en que especie animalito se podría convertir más facilmente Leire Pajín.
Como realmente creo que uno tiene derecho a votar movido por el corazón y no por la razón, veo más que legítimo votar o no votar en atención a los sentimientos que el propio aspecto del candidato nos produce; nadie puede exigirnos entonces racionalidad, después de la que despilfarra la secta política .
¿Por qué me tiene que dar igual la sonrisa de permanente satisfacción de la Ministra de Exteriores o el pelo teñido de Rajoy? Y aunque no votaría al capado PP, perfectamente podría hacerlo a María Dolores de Cospedal [si ganara menos, pues ya puede estar lozana ganando 40 millones de pesetas al año. Hay que ser golfa para decir que las cuentas las tiene claras, ¡¡guapita, el tenerlas claras no quiere decir que sean emolumentos adecuados o justos]por lo bien terminadita que está en lo meramente físico.
Sobre las cualidades intelectivas o cognitivas de la joven ministra creo que más que la preparación académica que es licenciada en sociología lo que creo es que la juventud (1976) no da suficientes referencias vitales para afrontar el cargo, también el problema lo tengo yo pues a medida que uno cumple años a los de detrás los vas considerando jóvenes, es por lo mismo que me gusta fundamentalmente leer a autores o muertos o sensiblemente más viejos que yo.
No Alcalde, ni en este reaccionario blog diría yo nada sobre lo que me inspiran o creo que inspiran "los morritos" de la ministra. En realidad lo que se deduce de sus palabras es que a vd. la ministra le pone a tono y que verle el rostro le excita por pura animalidad sexual propia o de otros.
¡Alcalde,la ha cagado bien! Y claro los enemigos del PP han aprovechado para explotarla en su beneficio esa metedura de pata de taberna, y hacen bien.
Estaba pensando a propósito de todo esto, y como se ha comentado a raíz de sus desafortunadas palabras, si se puede concluir que en la lucha política o en los comentarios periodísticos no se puede hablar del aspecto físico atractivo o no, de los políticos; no veo tan fácil de zanjar el tema. Federico Jimenez Losantos sabe utilizar con habilidad ciertos epitetos que quedan siempre a este lado de la barrera del buen gusto, además de resultar ciertos y graciosos.En realidad la materia es tan vieja como el Derecho Penal y es el discernimiento de lo que son o no INJURIAS y de la admisión o no de la exceptio veritatis, con el horizonte de que per se los comentarios zafios o groseros, no son necesariamente penales, ni como delito ni como falta, lo cual no libera a su autor de ser dueño y esclavo de sus palabras y de salir indemne de ellas, aunque el coste sea meramente político que no es poco.
En realidad yo como populacho me alegro de que esta gente entre sí, se atice de tal guisa y que la tensión dramática no decaiga,solo faltaría que lamentemos momentos de risa a costa de todos nuestros mangantes institucionales. Además, ¿qué le vamos a hacer si la cesada vicepresidenta y el aupado ministro Rubalcaba tienen rostros simiescos?. ¿Es eso un insulto?. Hay formas graciosas de decirlo como acudir a la etiqueta del Anís del Mono. Y lo que todos sabemos es en que especie animalito se podría convertir más facilmente Leire Pajín.
Como realmente creo que uno tiene derecho a votar movido por el corazón y no por la razón, veo más que legítimo votar o no votar en atención a los sentimientos que el propio aspecto del candidato nos produce; nadie puede exigirnos entonces racionalidad, después de la que despilfarra la secta política .
¿Por qué me tiene que dar igual la sonrisa de permanente satisfacción de la Ministra de Exteriores o el pelo teñido de Rajoy? Y aunque no votaría al capado PP, perfectamente podría hacerlo a María Dolores de Cospedal [si ganara menos, pues ya puede estar lozana ganando 40 millones de pesetas al año. Hay que ser golfa para decir que las cuentas las tiene claras, ¡¡guapita, el tenerlas claras no quiere decir que sean emolumentos adecuados o justos]por lo bien terminadita que está en lo meramente físico.
Sobre las cualidades intelectivas o cognitivas de la joven ministra creo que más que la preparación académica que es licenciada en sociología lo que creo es que la juventud (1976) no da suficientes referencias vitales para afrontar el cargo, también el problema lo tengo yo pues a medida que uno cumple años a los de detrás los vas considerando jóvenes, es por lo mismo que me gusta fundamentalmente leer a autores o muertos o sensiblemente más viejos que yo.
Es inevitable dejarse influir por el aspecto físico de los políticos, por eso todos tienen asesores de imagen. Otra cosa es que eso deba ser así, creo que hay que huir de esas influencias, lo importante son las ideas, no las personas, o así debería ser. Pero en esta época de crisis ideológica las apariencias son importantísimas, qué duda cabe. Lo de la salida de tono del alcalde no es nuevo en el panorama político, recuerdo con sonrojo el "¡A ver si te callas!" regio.
ResponderEliminarLeire Pajín como ministra de Sanidad cuanto menos me chirría, yo creo que para un cargo de ese tipo (como lo pensé con la anterior ministra de igualdad) hay que contar con cierta trayectoria vital y profesional, y no sólo política.
Y sí...yo también leo fundamentalmente autores mayores que no, aunque no necesariamente les exijo que estén muertos.
Un saludo.